Introducción a la catalogación temática

¿Qué es la catalogación temática? Siempre que entramos a la disciplina lo primero que tenemos que aprender forma parte de un pilar fundamental en nuestra formación y sin embargo es una de las más difíciles de dominar e incluso explicar a otras personas que no conocen el área. Cuando alguien escucha sobre catalogar, lo primero que les llega a la cabeza es describir un objeto físico, en sí la catalogación no es nada más registrar la información física o visual que tienes en tus manos. Grave error. En esta entrada te voy a contar un poco sobre lo que es la catalogación temática, uno de los procesos más laboriosos e interesantes que ejercen los profesionales de la información. 
23b26-bibliotecariaenelcine

En lo personal la catalogación en sí, siempre he tenido «sentimientos encontrados» ya que reconozco su importancia pero también creo que a veces, descuidamos otros aspectos de la carrera en nuestra formación que pueden complementar los procesos técnicos que tanto valoramos en los centros de información. Sin embargo, este proceso analítico-sintético de la disciplina es uno de los más fascinantes y el que más me gusta practicar. Porque requiere que soluciones dos preguntas importantes ¿cuál es la mejor palabra (o palabras) para identificar este ítem? y ¿cómo logro que este registro llegue al usuario que lo necesite?
 
Dentro de la catalogación hay dos ramas, la catalogación descriptiva que es la que está sujeta a las RCA2 y a RDA y la catalogación temática de la cual hablaremos en esta entrada. 
El Dr. Moreiro afirma que el documento es un acto de comunicación lingüística, esto es porque los contenidos informativos corren por el cauce del lenguaje. Por lo que el manejo de un documento se establece directamente como una actividad comunicativa social, intencional o no intencional. Dentro de la catalogación se debe tener mucho cuidado en  el uso del lenguaje que aplicamos para identificar un documento.
Según Moreiro en nuestro campo de acción los modelos lingüísticos que estudian los textos nos permiten interpretar dichos documentos, además de proveer herramientas para su análisis y representación de acuerdo a nuestro proceso de catalogación.
 
Ahora con el uso del Internet se han detectado dificultades para que un documento comunique su mensaje a un receptor debido a los problemas en cuanto al número de publicaciones que existen y la dispersión de las mismas aunado con un sinnúmero de fenómenos bibliométricos clásicos (algo que también destaca Moreiro).
Esto resulta más difícil para dar cuenta de la información que existe sobre un tema en concreto y este fenómeno se da más en el ámbito científico, debido al incremento de  la producción científica que aparece en revistas o publicaciones que no cuentan con una relación directa con el contenido. En esta parte entra la labor del profesional de la información que ocupa un papel intermediario que permite a cualquier usuario encontrar el documento pertinente y relevante para satisfacer sus necesidades.
 
El catalogador se convierte en un medio que busca transmitir un mensaje, ya que al recibir la información debe de tratarla de forma analítica-sintética para ofrecer a los usuarios una vía de acceso correcto y razonable de conocimientos científicos. Con esta labor se dispone de un instrumento teórico que son los modelos analíticos y lingüísticos que se familiarizan con el proceso metodológico que dio origen al documento. Gracias a esta serie de pasos el catalogar actúa como un medio práctico de la comunidad científica para poder llegar al usuario de una forma más accesible ya que a partir de la información original (del autor y editorial) se puede alcanzar una información referencial o secundaria de la misma mediante representaciones de contenido conseguidas a través del análisis documental.
 
En cuanto a niveles de descripción existen dos: la superficial y la semántica. En el nivel superficial se tiene al soporte como objeto de estudio y tiene como objetivo la identificación del documento. Aquí se utiliza la catalogación con base a las reglas y códigos RCA2, RDA y MARC21 que se utilizan para describir un ítem de forma sintética lo que tiene una representación referencial de dicho objeto.
En cuanto al nivel semántico se le divide en la superestructura y la macro-estructura que utiliza la tipología textual, la indización y el resumen para lograr dicha representación. La tipología textual se encarga de la superestructura, mientras que la indización y el resumen se encargan de la descripción de la macro-estructura.
 
Cabe destacar que la indización y el resumen son procesos que apoyan en la identificación del recurso en diferentes aspectos. La indización es la identificación de documentos por conjuntos que reúne algunos aspectos que coinciden entre sí. Se reflejan los conceptos que contiene el documento a través de términos representativos, es decir, descriptores de contenido que pueden identificar ítems en un solo tema en concreto. Sirven como guía al lector para localizar la información que requiere. Una forma común de recuperar información de bases de datos referenciales es mediante el uso de estos descriptores que se obtienen mediante la aplicación de los lenguajes documentales que se refieren a las áreas concretas de conocimiento y se pueden combinar con el uso de operadores booleanos.
Para esta acción se necesita de una adecuación de términos que describen fenómenos de un lenguaje especializado y dicha denominación de un texto concreto puede llegar por medio de un lenguaje documental como un tesauro.
Estos lenguajes controlados, según Marilyn Montalvo, tienen como propósito agrupar diversos recursos informativos bajo un mismo concepto para reducir las opciones de búsqueda en catálogos e índices. En la elaboración de dichos vocabularios se conjugan las disciplinas de la lexicografía, semántica, lexicología, morfología, sintaxis, taxonomía y la lógica. Dependiendo del tipo de usuario se pueden elegir los términos y aunque su asignación es subjetiva pueden usarse términos de uso popular o científicos (dependiendo de las necesidades identificadas). 
 
Ahora hablando del resumen, éste se consigue a través de una reducción del mensaje para la expresión más completa, rica y explicativa del documento desarrollado (Moreiro, 2004, p. 26). Extrae estructuras semánticas fundamentales y las expresa conforme al lenguaje natural para la representación.
 
El uso de la indización y el resumen tiene algunas desventajas como el tratar de explicar un documento sólo utilizando reducciones informativas lo que puede perder información valioso durante el proceso e incluso puede reestructurar en sus líneas semánticas principales desde los descriptores o desde el resumen. Sin embargo, el objetivo de estos procesos es que lleguemos al documento original sin tantas vueltas que nos lleve al lugar a donde queremos llegar.
 
Las fases para lograr dicho proceso son tres: reconocimiento, reducción y representación. La primera identifica y comprende su información más destacada y la distribución de la misma en el documento. La segunda se limita a los mensajes esenciales en líneas macro-estructurales y la tercera, es la expresión de los términos o códigos de indización y redacción del resumen que logra una nueva expresión de la información fundamental del texto.
Moreiro menciona que un texto para ser analizado debe ser informativo o al menos contener una serie de datos ordenados de forma coherente ya que no se puede hablar de información en el texto si no se cumple con este requisito. Mediante una observación acertada al señalar que nos comunicamos a través de textos y no palabras o frases por lo que éste se convierte en una unidad comunicativa-documental.
Cada discurso científico es un fragmento de discurso general con una metodología definida en la superestructura. Aquí se habla ya de una dicotomía significado/significante que traduce al texto por un paralelismo, en el cual las oraciones y frases que lo conforman resultan de la unión de expresión, contenido y la relación entre comunicantes y mensajes.
Ahora las macro-estructuras son las encargadas de organizar jerárquicamente el texto. Una macro-estructura es una representación de la información contenida en un discurso o parte de él. Se corresponde con la estructura profunda, representación semántica, global que define el significado del discurso, tema y materias de las que entiende. (Moreiro, 2004, p. 29). Aquí encontramos una macro-estructura global ya que permite organizar al autor y luego comprender su mensaje por los lectores, ya que organiza el texto como idea más general o global, vinculando todas las afirmaciones que lo componen. Por lo tanto, contiene la significación esencial del discurso. A partir de este proceso de abstracción comenzamos a estructurar conceptos y términos para la representación temática del ítem en cuestión.
Espero que les sea útil está pequeña entrada con una introducción sobre el proceso de catalogación temática y gracias por leer a Aprendiz de la información. 

Referencias

Moreiro González, José Antonio. El contenido de los documentos textuales : su análisis y representación mediante el lenguaje natural. Somonte-Cenero, Gijón, Asturias : Trea, c2004.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s